SER UN ESPÍRITU LIBRE
Hace unos años me definía por lo que hacía. Era publicista. Trabajaba en una agencia de publicidad 8 horas diarias (a veces más, nunca menos) y solo me sentía libre los sábados de siesta y los domingos de asado con amigos. De
Hace unos años me definía por lo que hacía. Era publicista. Trabajaba en una agencia de publicidad 8 horas diarias (a veces más, nunca menos) y solo me sentía libre los sábados de siesta y los domingos de asado con amigos. De